Conversando con una amiga, casada hace sólo un par de semanas, me comentaba que intentó seguir el método de los pasos para organizarse en casa, tal como lo propuse en mi blog hace un tiempo (pueden ver la serie completa dando clic aquí).
Aunque no es ama de casa “exclusiva”, ya que ella y su reciente marido trabajan fuera del hogar, sí debe hacerse cargo de las tareas domésticas, ya que, como muchas amas de casa, no paga a otra persona por hacer el servicio, con lo cual, atienden las labores de casa entre ambos.
Su principal inconveniente a la hora de aplicar el “método”, es justamente el uso de la computadora. Luego de trabajar en frente de un monitor toda la semana, lo que menos quería era volver a él durante el descanso del fin de semana o los días libres, según me explicó.
Así, me comprometí con ella a simplificar el “método” lo más posible, a partir de mi experiencia, de forma que no requiriera una computadora y, además, pudiese involucrar a otras personas (en este caso, su esposo) en la organización de las tareas del fin de semana.
De aquella solicitud, surgió este, que he llamado el “método de organización de fin de semana para el hogar”, aunque como verán, a pesar de su nombre, bien puede ser utilizado en cualquier momento.
A diferencia del otro, no supone el uso de la computadora (salvo que hagan impresiones), y no requiere ninguna planificación previa de las tareas. Es algo así como levantarse el sábado por la mañana, ver lo que está pendiente, ponerlo en papel y comenzar a hacerlo. Sin más preámbulo, se los presento:
El método de organización de fin de semana para el hogar
PASO 1: Prepararemos una hojita con dos columnas, y el número de filas que necesitemos, dependiendo de la cantidad de horas que tengamos disponibles en el día. Debería quedarnos algo así:
PASO 2: Una vez que tenemos este sencillo esquema, comenzaremos a llenar los espacios, del siguiente modo:
– Primero, colocamos las actividades que tienen una hora fija, como DESAYUNAR y ALMORZAR.
– Como se ve, cada cuadrícula representa media hora. Si una actividad se puede realizar en menos tiempo, dividimos la celda entre varias actividades, como REVISAR EL BUZÓN/ALIMENTAR AL PERRO. Y si nos toma una hora o más, entonces escribimos lo mismo las veces que haga falta, como GIMNASIO.
– Tal como hacíamos en el “método” original, debemos contemplar espacios para comer, compartir y descansar, siendo realistas en lo que verdaderamente podemos cumplir. Ya que estamos pensando en un fin de semana promedio, la idea no es tampoco pasarnos el día entero limpiando.
– Recorremos la casa rápidamente, observando las cosas que están pendientes (recoger la ropa sucia, llenar la lavadora, limpiar el baño, etc.) y las vamos anotando en los espacios vacíos, poniendo siempre dos o más actividades pequeñas en una sola cuadrícula, o una actividad que tomará al menos media hora, en un sólo espacio.
Deberán quedarnos poco a poco espacios llenos, y otros vacíos, así:
PASO 3: Si queremos integrar a otros miembros de la familia en el planeamiento, podemos indicar sus nombres en el mismo espacio, como “ANA: GIMNASIO/ PEDRO: FUTBOL”.
O bien, hacemos dos hojas idénticas, donde organizamos lo que hará cada uno.
PASO 4: Una vez que tenemos llenos todos los espacios, pegamos las hojitas en un lugar visible (como la puerta del refrigerador) y ¡manos a la obra!
Como ya mencioné en otra ocasión, podemos ir tachando o marcando las actividades que ya realizamos, y al final del día ¡sentirnos orgullosos de todo lo que logramos!
La efectividad depende de hacerlo sencillo, barato y simple: dibujar la tabla a mano en una hoja reutilizada, con un simple lápiz, es más que suficiente. Si podemos evitar imprimir, tanto mejor para el bolsillo y el ambiente…
Les garantizo que, si usan este sistema, dejarán de tener esa horrible sensación de que sus fines de semana se les escapan como agua entre los dedos. Y su casa estará mucho más presentable el lunes por la mañana. En especial si intentan llenar con, al menos, una actividad cada espacio.
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